SAP es uno de los sistemas de gestión empresarial más conocidos en todo el mundo y se emplea en organizaciones de cualquier tamaño y sector. Su función es optimizar los procesos y mejorar la toma de decisiones basada en datos. Por su flexibilidad, personalización y compatibilidad con otras aplicaciones, SAP como ERP se ha convertido en un referente.
Hoy veremos sus características y los beneficios que ofrece, pero también otras alternativas. Si te interesa profundizar en las opciones que hay para el análisis de datos y las formas en que se pueden usar para mejorar las operaciones de una empresa, te recomendamos nuestro Máster en Business Analytics e Inteligencia Artificial. Aprenderás las distintas herramientas tecnológicas del momento para el análisis de datos, así como metodologías ágiles y el impacto actual de la IA.
Comenzamos con qué es SAP. Se trata de un sistema ERP (Enterprise Resource Planning) desarrollado en Alemania y diseñado para facilitar la gestión integral de los procesos empresariales. Su objetivo principal es optimizar el flujo de trabajo entre diferentes áreas de una organización. Para ello, diferentes módulos relativos a funciones como finanzas, logística, recursos humanos o ventas, entre otros, quedarían integrados en una misma plataforma.
El lenguaje de programación que utiliza es ABAP (Advanced Business Application Programming). Es de cuarta generación y ha sido desarrollado exclusivamente para este sistema. Por tanto, tiene un grado de personalización muy alto y se adapta a las necesidades de cada empresa.
Se basa en un sistema que consta de tablas, que almacena y organiza volúmenes de datos muy grandes. De este modo, las empresas pueden configurar y visualizar con facilidad informes personalizados, que luego utilizarán para la toma de decisiones. Pero además, este ERP no solo unifica y gestiona los datos en tiempo real. También automatiza procesos, reduce errores y aumenta la eficiencia operativa.
En cuanto a sus usos, el sistema SAP tiene dos principales:
Por sus múltiples beneficios, SAP es una herramienta que utilizan tanto las empresas privadas como públicas. Los principales son los siguientes:
Los módulos de SAP son divisiones especializadas del sistema. Sirven para que las empresas puedan satisfacer sus necesidades relativas a la gestión eficiente de procesos, la reducción de tiempos o el aumento de la productividad. Gracias a ello, las empresas agilizan sus operaciones y se pueden centrar en sus objetivos estratégicos.
Los módulos más importantes y sus características son los siguientes:
Este módulo se centra en gestionar la contabilidad y las finanzas de forma práctica, dinámica y centralizada. Ayuda a las empresas a concentrar toda la información relacionada con sus operaciones financieras en un solo sistema.
El módulo FI puede integrarse con otros módulos, como el de ventas, para realizar análisis más completos y filtrar datos clave. Gracias a esto, se obtienen informes más detallados y se pueden hacer hipótesis informadas.
Entre las principales áreas gestionadas por este módulo se encuentran:
Inicialmente integrado en el módulo FI, el módulo SAP Controlling se volvió tan relevante que se convirtió en independiente. Está diseñado para gestionar las cuentas internas de la empresa, como los balances, beneficios y flujos de tesorería. Cuenta con herramientas avanzadas para el análisis de costes y beneficios.
El módulo CO incluye seis submódulos clave:
El módulo SD está dedicado a gestionar todo el ciclo de ventas y distribución, desde consultas y ofertas hasta precios y facturación. Este módulo es esencial para tener un buen control del inventario y para asegurar que los procesos de ventas sean eficientes.
Con el auge del comercio electrónico, SAP desarrolló este módulo para gestionar facturas, órdenes de venta y condiciones de envío de manera automatizada. De este modo, las empresas pueden gestionar sus transacciones de forma más ágil y con mayor precisión, y se optimiza tanto la experiencia del cliente como la operativa interna.
Este módulo está diseñado específicamente para la planificación y gestión de la producción y cuenta con diferentes funciones esenciales. Entre sus ocho submódulos destacan:
Este módulo está orientado a la gestión de materiales y la logística. Se encarga de aspectos como la contratación de bienes y servicios, la gestión de inventarios y el procesamiento de facturas. Una de sus funciones clave es la solicitud y organización de pedidos, ya que permite automatizar procesos y reducir errores en los datos logísticos.
SAP CS gestiona todos los servicios relacionados con el cliente. Por ejemplo, asistencia postventa, garantías, reparaciones y comunicación directa con los usuarios. Sin embargo, este módulo no opera de manera independiente, sino que se debe integrar con otros para garantizar la eficacia en los procesos previos y así poder ofrecer un servicio de calidad.
El módulo PM está orientado al mantenimiento de plantas y equipos. Ayuda a las empresas a gestionar averías, realizar mantenimientos preventivos y calcular la amortización de los activos. Se suele usar en combinación con el módulo CO, puesto que se pueden evaluar los costes relacionados con el mantenimiento y el impacto que tiene en las finanzas.
El módulo QM está diseñado para supervisar la calidad en todos los procesos. Por eso, su estructura colabora con el resto de módulos. Ayuda a las empresas a comparar equipos, procesos y estándares, para que puedan elegir las mejores opciones y mantener niveles de calidad elevados.
Este módulo se ocupa de todo lo relacionado con la gestión de recursos humanos. Por ejemplo, el registro de horas trabajadas, gestión de bajas, vacaciones y el cálculo de las nóminas. Además, el módulo HCM se utiliza también en los procesos de contratación y para organizar el talento dentro de la empresa.
SAP es uno de los sistemas ERP más conocidos y utilizados en todo el mundo. Sin embargo, no es la única solución que hay disponible en el mercado. En función de las necesidades específicas que tenga cada empresa, se puede optar por otros programas que tienen funcionalidades similares para gestionar y optimizar los procesos empresariales. Algunas de las alternativas a SAP más conocidas son las siguientes:
Oracle es un ERP basado en la nube con herramientas completas para finanzas, gestión de inventarios y CRM, entre otras. Es muy flexible y fácil de usar, por lo que es otra opción muy atractiva para liderar la transformación digital en empresas de diferentes tamaños e industrias.
Dynamic 365 es un sistema que combina herramientas de ERP y CRM. Permite la integración total con aplicaciones como Office y Teams. Su uso está recomendado en aquellas empresas que buscan mejorar la colaboración entre departamentos y automatizar procesos.
Infor ERP ofrece soluciones muy personalizables. Tiene una interfaz amigable y se centra en la analítica avanzada. Está diseñado para industrias específicas, como manufactura, salud y retail.
Odoo es una alternativa económica y modular, ideal para empresas pequeñas y medianas. Incluye módulos para gestión financiera, ventas e inventarios, con la ventaja de ser de código abierto.
Para empresas de pequeño tamaño que siguen queriendo apostar por el programa SAP, pero que no necesitan toda la potencia de este programa, existe una versión ligera llamada SAP Business One. Las funcionalidades son similares, pero adaptadas a presupuestos y estructuras más reducidas.
Antes de decantarse por una de estas herramientas, es importante hacer una comparativa de sus funciones y ponerlas en relación con el tamaño de la empresa y sus necesidades.