Hay conceptos tecnológicos que no son del todo nuevos, pero que, por algún motivo, cobran especial importancia y sus ventajas comienzan a hacerse virales. Las Progressive Web App o PWA, cuyo nombre se traduce como Aplicaciones Web Progresivas, son un ejemplo de ello y hoy se posicionan como una solución innovadora que combina la accesibilidad de las aplicaciones web con la funcionalidad avanzada de las aplicaciones nativas. En este artículo te contamos qué son y cómo están contribuyendo a la mejora de la experiencia del usuario.
Las Progressive Web Apps o PWA son una evolución en el mundo de las aplicaciones y el desarrollo web. En esencia, se trata de aplicaciones web que combinan lo mejor de los dos tipos de Apps que existen: la accesibilidad y el alcance de las aplicaciones web tradicionales, con la funcionalidad avanzada y la experiencia del usuario que ofrecen las aplicaciones nativas.
En concreto, y para facilitar la comprensión de las PWA, presentan tres características fundamentales:
Funcionan en diversas condiciones de conectividad. Están diseñadas para ofrecer un rendimiento confiable en conexiones sólidas y en condiciones de red intermitentes, incluso offline. Para lograrlo, utilizan los service workers, que son scripts en segundo plano que interceptan y manejan solicitudes de red. Gracias a ello, se permite que la aplicación responda rápidamente incluso cuando la conexión es limitada.
Se adaptan de manera fluida a diferentes dispositivos y tamaños de pantalla. El resultado es que la experiencia del usuario es óptima, sin importar si se está utilizando un ordenador de escritorio, una tableta o un teléfono móvil.
La seguridad es otro pilar fundamental, por eso, las PWAs se entregan a través del protocolo HTTPS, con la información transmitida entre el usuario y la aplicación encriptada. Este es uno de los aspectos a los que más atención se presta, con especial hincapié en la privacidad y la protección de datos.
Ventajas de las PWAs en comparación con las aplicaciones nativas
Reducción de costes. Desarrollar y mantener una PWA puede ser más rentable que crear aplicaciones nativas para múltiples plataformas. La razón se encuentra en el código, que puede adaptarse a varios dispositivos y sistemas operativos, con el consecuente ahorro de tiempo y recursos en comparación con el desarrollo y mantenimiento de aplicaciones nativas separadas.
Las Progressive Web Apps ofrecen una combinación única de accesibilidad, rendimiento y funcionalidad y pueden desarrollarse siguiendo estos pasos:
Antes de comenzar, organiza tu proyecto y crea una estructura de archivos adecuada. Asegúrate de incluir los archivos HTML, CSS y JavaScript necesarios.
El manifiesto web es un archivo JSON que define la identidad de tu PWA. Incluye información como el nombre de la aplicación, iconos, colores y cómo debe aparecer cuando se agrega a la pantalla de inicio. Garantiza una experiencia coherente en diferentes dispositivos.
Los service workers actuarán como intermediarios entre tu PWA y la red. Se encargan de cachear recursos para permitir un rendimiento más rápido y la capacidad de funcionar offline. Configura los service workers para manejar la lógica de caché y actualizar automáticamente.
Asegúrate de que tu PWA tenga un diseño responsive. Utiliza técnicas de CSS como Media Queries para ajustar el diseño, el tamaño de fuente y las imágenes según el dispositivo. La interfaz será visible y funcionará en cualquier pantalla. Los conocimientos en maquetación web pueden ayudarte.
Utiliza JavaScript para agregar interactividad y funcionalidad a tu PWA. Puedes incorporar efectos visuales, animaciones y características específicas de la aplicación, pero mantén un equilibrio entre la interactividad y el rendimiento. Explorar ejemplos de portfolios de web developer te puede ayudar a inspirarte en la implementación de funciones interactivas que resulten atractivas.
Para inspirarte en la creación de tu propia PWA, te dejamos algunos ejemplos reales:
En resumen, las PWA marcan un hito en la convergencia entre la web y las aplicaciones, gracias al diseño adaptable, el rendimiento confiable y la accesibilidad instantánea que redefinen la experiencia del usuario.