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El increíble origen de la inteligencia artificial

Data 
17/12/2019

La inteligencia artificial ha llegado a nuestras vidas y lo ha hecho para quedarse. Esta ciencia que incluía lógica, computación, programación y que, en un principio, formaba parte de empresas muy punteras y con objetivos muy específicos, está cada vez más integrada en la sociedad. Cada día, más sistemas basados en esta ciencia forman parte de nuestro día a día y nos ayudan a automatizar y facilitar nuestras vidas.

Lo cierto es que la inteligencia artificial automatiza multitud de actividades realizadas por los humanos, desde la toma de decisiones hasta la propia metodología humana para saber aprender. Todos conocemos a Siri, a los coches autónomos de Google, generadores de noticias, reconocimiento facial de nuestro Smartphone o los dispositivos que hacen nuestra casa inteligente. Entender las aplicaciones de la inteligencia artificial en las industrias se convierte en algo esencial para adaptarnos al cambiante ecosistema digital actual.

Inteligencia artificial: origen y evolución

Pero, ¿qué es realmente la inteligencia artificial? Para poder definir este concepto es necesario remontarnos al origen y evolución de esta ciencia.

A pesar de que el término “inteligencia artificial” no se acuñó hasta 1956 en una conferencia, el británico Alan Turing trabajó durante los años 30 para poder llegar a crear esta ciencia. De hecho, el desarrollo de la lógica matemática y de la computación en el siglo XIX fueron los pilares que permitieron el origen y evolución de la inteligencia artificial.

Hasta llegar a 1950, cuando Turing consolidó y asentó las bases de lo que hoy en día consideramos inteligencia artificial, pasaron muchos hitos de la historia que dieron lugar a este origen:

  1. En 1315, Ramon Llull expresó en su libro Ars Magna su voluntad de crear una máquina que identificara la veracidad o falsedad de un postulado. Su obra se considera uno de los primeros acercamientos a la inteligencia artificial.
  2. En 1879, Gottlog Fredge considera la lógica de primer orden, también llamada lógica predicativa, un sistema que estudia los lenguajes formales, que todavía se utiliza a día de hoy.
  3. En 1903, Lee de Forest inventa el tríodo, la válvula que dio inicio a la era de la electrónica y gracias al cual llegaron teléfonos y radios a la vida cotidiana.
  4. En 1936, el mismo Turing, realiza una serie de publicaciones que sientan las bases teóricas de todas las ciencias de la computación. Ese mismo año se construyó también el primer equipo computador electromecánico.

Sesenta años después de estos primeros pasos, que asentaron las bases para el posterior desarrollo de la inteligencia artificial, surgieron los primeros agentes inteligentes. Estos, a su vez, fueron evolucionando durante los años 90 en los diferentes productos y máquinas con las que contamos hoy en día. El ejemplo más destacado es el ordenador.

Con todo esto, podemos definir la inteligencia artificial como un área de la ciencia computacional que se encarga de replicar en máquinas, diferentes capacidades hasta ahora solo inherentes al ser humano.

Sin embargo, y pese a todos los avances a lo largo de los últimos siglos, lo cierto es que todavía queda mucho por escribir sobre la inteligencia artificial. Aunque en cuanto a evolución ya es una realidad y está suponiendo un cambio de paradigma en el mundo actual, nos encontramos muy al inicio de explotar todos los beneficios que una inteligencia artificial avanzada puede ofrecernos.

Los cambios que poco a poco vamos adoptando tanto en nuestra vida laboral como en nuestro día a día gracias a la inteligencia artificial, no han hecho más que empezar. ¿Hasta dónde llegaremos?



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