Posicionarse como empresas en el mundo digital, así como ser capaces de satisfacer mejor que la competencia, las necesidades de los clientes, implica el análisis de datos para identificar oportunidades. En la actualidad, la información es poder y esta se obtiene precisamente de los anteriores, sobre todo cuando se poseen en grandes cantidades. Para procesarlas, se necesita la figura del data analyst o analista de datos. Un perfil profesional cada vez más demandado y con excelentes perspectivas de futuro.
En este artículo, te contamos todos los detalles sobre sus responsabilidades y la formación que necesitas para convertirte en uno.
El data analyst o analista de datos es un especialista que conoce a la perfección las técnicas y las herramientas existentes hoy en día para examinar datos complejos. Su objetivo principal es traducir estos datos en información con significado y valor para la empresa, para que permita facilitar la toma de decisiones estratégicas.
Sin embargo, para ser un buen analista, no solo es necesario contar con habilidades técnicas. También, se requiere la capacidad de comprender el contexto empresarial de cada negocio, y de tener habilidades comunicativas para saber compartir sus hallazgos con eficacia a todas las partes interesadas.
Las salidas profesionales son diversas y están en constante expansión, dada la importancia del Big Data en la actualidad en todos los sectores. Desde el sector financiero hasta la salud, y pasando por el comercio minorista y la tecnología, prácticamente todas las industrias reconocen la importancia de los datos para impulsar su éxito.
Estos perfiles profesionales pueden encontrar empleo en empresas de todos los tamaños, desde startups hasta corporativos multinacionales. Además, su número sigue en aumento. En lo que respecta al sueldo de analista de datos, la cifra media en nuestro país en 2023 se sitúa en 23.300 € al año. Quienes cuentan con más experiencia, pueden alcanzar los 38.417 € al año.
Las funciones de este perfil variarán de una empresa a otra, así como de su especialización en su área de trabajo. A grandes rasgos, las funciones de este puesto son las siguientes:
Estudiar Big Data o análisis de datos son dos trayectorias populares en esta era digital. Tanto en una como en otra, se puede comenzar con una formación de base que provenga de diversas áreas. Y, ya que este tipo de carreras profesionales relativamente nuevas, suelen tener formación específica complementaria.
Estas áreas a las que hemos hecho referencia son la ingeniería informática, las matemáticas, la física, la economía o la administración de empresas, la estadística o la ingeniería de telecomunicaciones. Con cualquiera de estos grados, se obtienen unos conocimientos que pueden servir como principio. No obstante, no son un requisito imprescindible.
El dominio de herramientas de análisis de datos sí es fundamental para familiarizarse con este ámbito. Por ejemplo, python, R y SQL. También es importante el análisis de programación. Junto a estas, también cabe mencionar el machine learning y la inteligencia artificial, para las que existen ya cursos específicos. Otras habilidades a desarrollar son las de comunicación, para poder transmitir los hallazgos. En última instancia, se puede solicitar experiencia previa.
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