¿Te has preguntado alguna vez qué es el Business Analytics? Si no lo has hecho, deberías, pues presenta multitud de oportunidades de cara al futuro de los profesionales que escojan desarrollar sus carreras en esta área.
Descubre a continuación qué es la analítica de datos para la toma de decisiones empresariales y echa un vistazo a nuestro Máster en Business Analytics e IA. Diseña tu propio futuro con Inesdi.
Antes de entrar en profundidad en el significado y los elementos que componen la analítica de datos en las empresas o Business Analytics, debes saber que se trata de una combinación compleja de prácticas, tecnologías y habilidades. A partir de las sinergias que se establecen entre todas estas cualidades, se examina el rendimiento de una empresa a partir de sus datos.
Así pues, si vamos a hablar de Business Analytics y qué es en concreto, debemos referirnos a las siguientes metodologías, que son las que entran en juego cuando se trata de analítica empresarial:
Con el objetivo de estudiar, comprender y transformar los datos en información de utilidad para las empresas a la hora de anticipar tendencias y predecir resultados.
En definitiva, el fin principal del Business Analytics es ayudar a las organizaciones empresariales a tomar mejores decisiones basadas en datos.
El hecho es que ambos persiguen mejorar la operatividad de las empresas. Ambos se dedican a analizar datos brutos para convertirlos en información útil a la que aplicar métricas; sin embargo, existe una diferencia de matiz entre ambas disciplinas.
Muchas personas tienden a contestar a la pregunta de Business Analytics, qué es, refiriéndose en realidad a Data Science. La confusión es comprensible, pues ambas disciplinas recopilan datos, elaboran modelos y sacan conclusiones.
La principal diferencia entre ambas estriba en que el término Data Science es más amplio y responde a cuestiones relacionadas con las preferencias del público objetivo y otros factores externos. Por su parte, el Business Analytics se relaciona más con asuntos estrictamente relativos al negocio, como costes o beneficios.
Por resumirlo en una sola frase: la ciencia de los datos estudia datos y la analítica empresarial estudia datos empresariales. No confundir tampoco con Big Data.
Dependiendo del tipo de análisis de datos en las empresas que se lleve a cabo, los datos obtenidos tendrán un efecto u otro sobre dichas organizaciones. Veamos qué tipos de BA existen, con algunos ejemplos.
Se usa para identificar patrones y tendencias y los datos que se analizan son, sobre todo, datos históricos y KPIs relevantes. Las técnicas de extracción y agregación de datos son importantes en este tipo de análisis, pues permiten obtener una visión global de lo ocurrido en el pasado y lo que ocurre en el presente.
Un ejemplo sería el análisis de los visitantes de un sitio web en un tramo determinado de fechas. De hecho, uno de los usos más comunes de análisis descriptivo es el estudio del comportamiento de los clientes.
Este tipo de Business Analytics pone el foco en el rendimiento pasado de la empresa con el fin de identificar los elementos que influyen en las tendencias esperadas.
Algunas de las técnicas que se utilizan en este tipo de análisis son: descubrimiento y extracción de datos, así como correlación. El uso de algoritmos de clasificación y regresión también es frecuente.
Se usa el análisis de diagnósticos, por ejemplo, para hallar la causa de un problema determinado, como puede ser una disminución en el número de clics.
Como su propio nombre indica, el análisis predictivo de datos se ocupa de evaluar los resultados obtenidos por una empresa para predecir su futuro. Lo hace vía herramientas de Machine Learning y suele tomar los datos de la analítica descriptiva que mencionábamos más arriba.
Los equipos de marketing y ventas son los que más usan este tipo de Business Analytics para predecir el comportamiento de los clientes. Suelen utilizar datos extraídos de redes sociales, entre otros.
A partir del análisis de los datos relativos al rendimiento empresarial, este tipo de Business Analytics establece el modo en que una empresa deberá comportarse en el futuro.
Por ejemplo, cuando el uso de un servicio disminuye, el análisis prescriptivo puede sugerir un ajuste del mismo para revitalizarlo.