A los sistemas de producción de Toyota, les debemos la creación de la metodología Lean, que se utiliza para reducir al mínimo los desperdicios. Dentro de esta, se utiliza el llamado Value Stream Mapping (VSM) o Mapeo de la Cadena de Valor, que sirve para identificar ineficiencias y mejorar el flujo de trabajo.
Si bien esta herramienta se usa en diferentes industrias, hay un equivalente en el desarrollo de software, para reducir los tiempos de entrega y aportar valor al cliente.
El Value Stream Mapping (VSM) es una representación gráfica, en forma de mapa o diagrama, que se usa para visualizar, analizar y mejorar el flujo en los procesos de producción. Dentro de este flujo se incluyen todos los materiales y la información necesarios para entregar un producto o servicio.
Es una herramienta visual que se utiliza principalmente en el marco de la metodología Lean, y se puede aplicar a diferentes sectores como la manufactura, la sanidad, la logística o el desarrollo de software o proyectos digitales. La utilidad en estos últimos es muy alta, ya que permiten que un diseñador de interacción pueda colaborar para identificar y mejorar los puntos clave en los que los usuarios interactúan con el sistema.
El objetivo del VSM, o mapa de flujo de valor, es identificar todos los pasos en un proceso y categorizar cada uno de ellos en actividades que aportan valor o que no lo hacen. Cuando dicho flujo se visualiza, resulta más fácil para los equipos identificar dónde se generan más ineficiencias, cuellos de botella o actividades en el estado actual que no aportan valor. A partir de ahí, se optimizarán o eliminarán para mejorar el rendimiento general de la cadena de valor. En un estado futuro.
El principal objetivo del Value Stream Mapping es la mejora continua. Pero si bien el VSM identifica problemas y propone soluciones para un momento determinado, se recomienda adoptar esta forma de trabajar a lo largo del tiempo, a lo que se conoce como Value Stream Management. Los beneficios que se obtienen son los siguientes:
- Identificación de cuellos de botella. Se visualizan las partes del proceso que ralentizan el flujo de trabajo. Para ello, puede ser útil el uso de herramientas de Business Intelligence.
- Reducción de tiempos de ciclo. Identificar las ineficiencias permite implementar soluciones para acelerar los tiempos de producción o servicio.
- Mejora de la comunicación. Como herramienta visual, el equipo comprende mejor cómo funciona el proceso y dónde se pueden realizar mejoras.
- Mayor alineación con los objetivos del cliente. A través del VSM se pueden identificar las necesidades reales del cliente y ajustar los procesos para cumplirlas con mayor eficiencia.
- Optimización de recursos. Elimina actividades que no aportan valor para que los recursos se utilicen de manera más eficiente.
En lo que respecta a su utilización, por lo general se aplica cuando una empresa o un equipo quiere mejorar la eficiencia de sus procesos. Esto puede ocurrir en situaciones como el lanzamiento de un nuevo producto o servicio, las auditorías de procesos, los cambios en el sistema de producción o cuando hay problemas recurrentes en la cadena de valor.
El proceso de creación del Value Stream Mapping puede ser algo complejo. Para simplificarlo, solo hay que seguir estos pasos:
Hay que determinar qué proceso o conjunto de procesos se van a mapear. Puede ser toda la cadena de valor, desde el suministro de materia prima hasta la entrega del producto final, o solo un segmento del proceso. Se definirá el punto de inicio y fin del mapeo, y los productos o servicios involucrados.
El equipo se compondrá de representantes de todas las áreas involucradas en el proceso a mapear. Por ejemplo, operarios de producción, gerentes de departamento o personal de soporte. Cuantas más perspectivas haya, más fácil será identificar los puntos débiles y las áreas de mejora.
El siguiente paso es observar y documentar el proceso tal como ocurre actualmente en todas las etapas del flujo de trabajo. Se recogerán datos como tiempos de ciclo, tiempos de espera, inventarios, rutas de información y cualquier otra actividad que consuma recursos.
Con toda la información, se hará el mapa del estado actual para visualizar todos los elementos del proceso, incluidos los flujos de información y materiales. Se deben usar símbolos estándar de VSM para representar correctamente cada actividad, como los tiempos de ciclo o las operaciones que añaden valor y las que no.
Con el mapa del estado actual en mano, el equipo puede identificar las áreas que no aportan valor y que son susceptibles de mejora. Aquí es donde se aplican los principios Lean para eliminar desperdicios y optimizar el proceso.
Cuando se han identificado las oportunidades de mejora, el siguiente paso es diseñar el mapa del estado futuro. Este será el escenario ideal sin ineficiencias y con el flujo de trabajo optimizado. El equipo debe trabajar en conjunto para identificar las mejoras y planificar su implementación.
El último paso del Value Stream Mapping es desarrollar un plan de acción para implementar las mejoras. Este plan debe incluir metas claras, plazos, responsables y métricas de seguimiento para evaluar el éxito de las mejoras implementadas.
Las herramientas para mejorar la eficiencia y la calidad son cada vez más comunes en todos los sectores. En Inesdi nos enfocamos sobre todo en el desarrollo de proyectos de software. En este entorno, puedes aprender a aplicar este tipo de metodologías con nuestros másteres.